"Casos Clínicos"

Mi foto
Sevilla, Huelva, El Rompido, Andaluz.
Licenciado en Medicina y Cirugía. Frustrado Alquimista. Probable Metafísico. El que mejor canta los fandangos muy malamente del mundo. Ronco a compás de Martinete.
Mostrando entradas con la etiqueta DELIA. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta DELIA. Mostrar todas las entradas

martes, 24 de enero de 2023

Mis familias Orta y Balbontín.

La historia de la rama de la familia Orta, apellido que llevo en mis genes, comienza en Alosno, pueblo de la sierra del Andévalo en la provincia de Huelva. 
Manuel de Orta Limón (1765) casado con María Blanco de Orta en 1796 (en los pueblos era frecuente que se casaran los parientes…) tienen varios hijos. Uno de ellos, Juan José de Orta y Blanco nace en 1836 y es nuestro tatarabuelo, creo. 
 Siendo joven es enviado a Lisboa, donde había hecho fortuna un hermano mayor de su padre, su tío Antonio José de Orta y Limón (Alosno 1804), radicado en Portugal, banquero y financiero de la línea ferroviaria lusitana y al que el Rey de Portugal Pedro V había concedido el titulo de Vizconde de Orta en 1854. 
 Al parecer el sobrino Juan José quiso amores con una de sus primas portuguesas, por lo que su tío Vizconde Antonio lo despacha con viento fresco mandándolo a la sudamérica para que se buscara la vida lejos de sus queridas hijas. Consta confirmación de entrada en Montevideo el 8 de diciembre de 1862, como comerciante a la edad e 26 años. 
Desde Uruguay se desplaza a Argentina donde el intrépido Juan José hace uso de la experiencia comercial aprendida de su tío lusitano y pronto tiene éxito en los negocios convirtiéndose en un joven acaudalado que, por los buenos modales que trae de la corte portuguesa, es aceptado en la sociedad bonaerense. 
 En ese ambiente conoce a la que será su esposa, la aristócrata uruguaya Ana de Sousa-Martins Rocamora (padre portugués y madre española) con la que contrae matrimonio en 1867. En Argentina nacen los nueve primeros hijos de este matrimonio: Juan José, María Manuela, Manuel, Ana, María Dolores, Enrique, Eduardo, Elena y Emilia. Signo de su arraigo social y privilegiada situación económica, fue que el Presidente de la República de la Plata apadrinó a Eduardo, el menor de los varones. 
 A pesar de su éxitos, Juan José echa de menos a España y decide regresar a sus orígenes por lo que se embarca con destino a Huelva con toda la familia, enseres variados y un criado de la Patagonia de nombre Jerónimo y de rostro cobrizo. 
 Otro de sus hermanos alosneros Manuel de Orta y Limón, se había establecido en el pueblo costero de Cartaya donde formó familia al casarse con Isabel Morón. Seguramente por las noticias de este hermano alabando la bendita tierra cartayera, una vez que la familia desembarca en Cádiz, navega en velero de línea hasta Huelva/Aljaraque y desde allí se trasladan en carros hasta Cartaya -hacen una entrada muy recordada, sobre todo por el aspecto del indio Jerónimo- donde se afincan definitivamente. En Cartaya nacen Elisa y Roberto. 
 Al poco tiempo el hijo mayor Juan José, sintiéndose argentino, decide regresar a su país con gran pena de su madre Ana de Sousa-Martins que, recordando a su hijo, paseaba con su hija Ana hasta las afueras del pueblo subiendo al “cabezo colorao” desde donde podía ver el mar… 
 En pocos años Juan José de Orta y su esposa adquieren una casa en Sevilla en la Plaza de San Marín nº 6, allí nacen los dos hijos pequeños: Delia y Fernando. 

 Rama Balbontín de Orta

 Ana de Orta y Sousa-Martins, nacida en Buenos Aires en 1872, conoce en Sevilla a un joven industrial, huérfano de padre, llamado Enrique Balbontín Gil, con el que se casa en la Iglesia de San Martín en 1890, viviendo en la calle San Vicente de Sevilla. Fueron sus hijos: Ana María, Enrique, Juan José, Julio, María de la Salud, Aurora, Elena, Eduardo, Edmundo, Alberto, Roberto y Guillermo Balbontín de Orta. 
 Enrique es un gran industrial con afán de negocios e invierte en una gran fundición de acero entre las calles Goles y Torneo, donde construye una gran casa familiar a orillas del Guadalquivir. El negocio va viento en popa e incluso se expande a Savona (Italia) para construir una nueva fundición. Precisamente es en Savona donde fallece Enrique de infarto a la edad de 44 años. 
 Su hijo mayor Enrique Balbontín de Orta (1892), es quien queda al frente del negocio familiar en Sevilla con la ayuda de su hermano Julio que se traslada a Savona. Enrique Balbontin de Orta, casado con María Luisa Gorina Ramirez, fue Presidente de la Diputación de Sevilla, teniente de Alcalde del Ayuntamiento y tercer Presidente del Sevilla FC. Desgraciadamente la Segunda Guerra Mundial dio al traste con el negocio de la fundición tanto en Sevilla como en Sabona. 
 Otro hermano, Alberto Balbontín de Orta (Sevilla 1903-1972) casado con María Antonia Polledo, arquitecto eminente, fundador de la ETSAS, el cual junto a su compañero Antonio Delgado y Roig, construyen la nueva Ermita de la Vírgen del Rocío en Almonte, proyectan la reforma de la Real Fábrica de Tabacos y dirigen la construcción de la nueva la Basílica del Gran Poder en Sevilla, entre otros proyectos. 
 Ana de Orta Sousa-Martins, ya viuda de Enrique Balbóntin Gil, decide comprar los terrenos del “cerro colorao” cartayero (aquel a donde paseaba con su madre para mirar al mar), poniéndole el nombre de “Cerro de Buenos Aires” en recuerdo de su infancia y Villa Santa Ana a su casa en lo alto del cerro dando a la marisma y al mar, en honor de su querida madre. 
 A ese “cerro colorao” ya bautizado como “Buenos Aires” se van agregando chalets de todos los descendientes de esta gran familia Balbontin de Orta: mis tíos y primos Balbontín Noval, Balbontín Gorina, Balbontín Polledo, Valverde Balbontín, Royo Balbontín, Romero Balbontín, Zybikosvki Balbontín, Arreciado Balbontín… y toda su descendencia. 
Allí pasé con mis queridos primos los primeros veranos de mi vida. Llegué a Cartaya -ya bautizado- con 7 días de vida, al chalet de mis abuelos Pepe López-Pazo y Delia Noval de Orta en la subida al "cerro colorao". 
Allí aprendí a andar, a nadar, a montar en bici, a remar, a coger bocas, a subirme a los árboles, a jugar al futbol y a tirar piedras. 

 Rama Noval de Orta 

Delia de Orta Sousa-Martins era la más pequeña de las hijas de Juan José de Orta y Ana Sousa-Martins. Dicen que era una belleza. Se casó en Sevilla con un marino de guerra, Antonio Noval de Celis y tuvieron dos hijas: Delia y María Teresa Noval de Orta
 María Teresa se casó con su primo-hermano Guillermo Balbontín de Orta y tuvieron ocho hijos: Teresa, Guillermo, Mario, Delia, Juan Carlos, Julio, Roberto y Margarita. 

 Delia Noval de Orta se casó con José Antonio López-Pazo Ganzinotto y tuvieron cinco hijos: Pilar, Delia, Pepe, Carmen y Lucía. 

 Pilar López-Pazo Noval, se casó con Celso Pareja-Obregón García. Mis padres. Hijos: Concha, Lourdes, Celso, Jose María, Pilar, Fernando, Reyes (qepd) y Jesús Manuel.  
Yo soy Celso.

 Mas información en: 


 PD. Gracias a la labor de Manuel Suarez Romero (El Chacho), mi tía Delia Balbontín Noval; José Marina, Wikipedia y Google, he podido escribir esta historia.

jueves, 7 de abril de 2011

LA TEORIA DE LAS CUERDAS



Autora Lourdes Pareja-Obregón y familia.

LA TEORIA DE LAS CUERDAS 1.

Después de mi ajetreo diario, a las cuatro de la tarde me siento cómodamente en el sofá y pongo algún documental que me relaje y me ayude a echar una cabezada. El otro día ví (sin dormirme) "La teoría de las cuerdas".
Mi explicación es breve y malísima porque no entendí nada, pero me asombró lo que NO sabemos lo seres humanos y a lo poco que por lo visto hemos llegado.
En el núcleo de los núcleos del átomo, de los protones electrones y neutrones (todos con premio), hay unas micro partículas tan pequeñas, que prácicamente no tienen masa ni volumen y que están compuestas por unas micro cuerdas o filamentos que vibran de modo continuo y desaforado.
Estas vibraciones se salen de la comprensión de las mentes humanas más brillantes, pero según complicadas formulas matemáticas y sesudos estudios, éstas mini cuerdas vibrantes podrían tener relación con el polvo estelar, lo que ellos llaman "la materia oscura", el cual produce unas fuerzas gravitatorias a nivel cósmico y universal que afectan a todas las galaxias y astros del universo, además y esto es lo más de lo más, por las formulas hechas, éstas cuerdas vibrantes tienen muchas dimensiones, las que ya conocemos, más el espacio-tiempo, y por lo visto muchas más que no nos podemos ni imaginar. CADA DIA CREO MAS EN DIOS BENDITO Y LA VIRGEN MARÍA, SU SANTÍSIMA MADRE.-
LA TEORÍA DE LAS CUERDAS 2.-
Las cuerdas que yo conozco, son las que llevan prácticamente toda la historia del hombre pensante acompañándonos y ayudándonos en el avance de la humanidad.
Han servido para amarrar hachas de cuerda en la prehistoria, para bridar palos y diseñar un carro con ruedas, y en la construcción de casas dónde cobijarse y de catedrales magníficas, en las edades más feroces de la humanidad para ejecutar personas, desde siempre ha sido instrumento indispensable para muchos suicidas, ha anclado barcos en los fondos marinos y los ha retenido atracados en los puertos, se han hecho maravillosos nudos marineros, todo un arte, con las cuerdas 2, se han hecho también columpios mágicos que han llevado al sumun la felicidad de los niños, con ellas se tiende la ropa al sol, se amarran paquetes y cartas de amor. CADA DIA CREO MÁS EN EL ESTUDIO CIENTÍFICO.-
MARAVILLOSO......
delia dijo...
Lourdes, te has dejado en el tintero las cuerdas 3: la de los violines, las guitarras, las arpas, los pianos... Podría decirse que están hechas con lo mejor de las otras dos.
LA TEORÍA DE LAS CUERDAS..Y 4.
Tienes razón Delia. Mientras las cuerdas subatómicas mueven el espacio y el tiempo a su antojo, aceleran galaxias, manejan las materias más oscuras y las dimensiones más impensables, aquí, en éste grano de arena planetario, con nuestras cuerdas fabricamos los instrumentos precisos para que, en manos de artistas creen melodías maravillosas. Así que cualquier día al atardecer, sentados en un sillón con su entresijo interno de cuerdas, viendo a los niños felices jugando con su vaivén, la ropa blanca al sereno, y oyendo las cuatro estaciones de Vivaldi, nos ponemos muy por encima del universo entero con todos sus secretos, porque el verdadero misterio de la vida lo tenemos ésa tarde entre las manos..
Anónimo dijo...
LA TEORIA DE LAS CUERDAS ... Y 5.
¿Y como son esas cuerdas invisibles que atan a las personas entre si? ¿De qué están hechas?. Esas deben estar fabricadas por un Ser mucho mas grande que todos los científicos no alcanzan a fabricar una.
Como si no, vamos a explicar que una madre se sienta atada a un hijo desde que lo concibe hasta el último día de su vida. Y que un padre, sienta lo mismo aún sin portarlo en su vientre.
Y que la sangre, te tire de la forma que lo hace. Y te sientas de por vida atado por el cariño a tus hermanos, tus padres, tus primos, tus tíos... tu sangre. Ya queda lo más difícil, un buen día conoces al que será tu compañero y lo decides libremente, y sin ser de tu familia, vas y compartes toda una vida y llegas a quererle mas que a nadie. ¿Y eso con qué se ata?. Las cuerdas que anudan los corazones deben estar hechas de un material muy especial. Imagínate que anudan sentimientos, desatan pasiones, atan vínculos, unen amistades, y por atar, son capaces hasta de atarte a los recuerdos y seguir queriendo toda tu vida a los que se fueron para siempre, pero que dejaron aquí sus ataduras.Yo no entiendo de micro cuerdas, de átomos ni filamentos, que Lourdes lo explica que dá gloria, igual que todo lo que escribe, pero quería hablaros de otras ataduras y otras cuerdas... las que me unen a vosotros. Os quiero familia. RPO
Oléeeeee prima Rocío..tu si que has dao con la verdadera cuerda...un abrazo guapa, artista y buena con todos los tuyos....TU SI QUE VALES CAMPEONA..
Concha Pareja-Obregón Lopez-Pazo dijo...
Como estoy totalmente de acuerdo con Lourdes, con Delia y con Rocio, os doy mi versión de las cuerdas. Yo creo que las cuerdas nunca deben ser cuerdas rígidas y ásperas, todo lo contrario, deben ser suaves y elásticas, aunque nos regalen melodias maravillosas, aunque anuden los sentimientos y aunque sirvan para sujetar el universo entero. Os quiero a las tres. ¿Y 6?.
Pues la seis...Rocío ha dado en el clavo..EL AMOR..AUNQUE SUENE CURSI..ESA CUERDA ATA MÁS QUE TODAS LAS FUERZAS DEL UNIVERSO..
Anónimo dijo...
YO ME QUEDO CON EL 5, DESPUÉS DE HABER LEIDO ESTE ENTENDER DE LAS CUERDAS DEL AMOR Y DEL CARIÑO..... NO HAY MÁS QUE HABLAR....
NO SE PUEDE EXPRESAR MEJOR.
OLE OLE Y OLE
Yo también, mi prima Rocío es única desde siempre..guapa eres todo querer. Muuaa.


miércoles, 2 de marzo de 2011

LA MUJER ANONIMA


Acepto la invitación de Celso a escribir sobre algún tema de interés en este foro y cogiendo el testigo que me pasa mi hermana Rocio, sobre lo orígenes del dicho “al baño maría” quiero hablaros sobre un tema: LA MUJER ANÓNIMA.
En primer lugar ampliar nuestros conocimientos, ya que existe una segunda versión que atribuye el origen de este término a la alquimista “María la Judía”.
Fue una mujer que trabajó en la Biblioteca de Alejandría, dos siglos antes que Hipatia (a esa sí la conocemos por la película  “Ágora”), las dos mujeres más importantes de la época. Alquimista e inventora, lo que más llama la atención fue los aparatos de laboratorio que inventó.  No hace falta que os cuente más porque sólo teneis que buscarla en Internet para saber todo sobre esta mujer. Merece la pena.
Hipatia, María la Judía… fueron dos de las miles de mujeres que por su condición de “mujer” han permanecido en el anonimato, siendo brillantes y con trabajos excepcionales. Yo no sé vosotros, pero yo no sabía quien era Hipatia hasta que ví la  película de Amenábar.
Y esto me hace reflexionar y me llena de admiración las miles de mujeres que a lo largo de la historia de la humanidad han desarrollado las ciencias, las letras, las artes… sin ser reconocido su trabajo, por el hecho de su condición de mujer. Mujeres con doble mérito pues dedicaron su vida a desarrollar su capacidad intelectual con el handicap de tener que luchar contra las limitaciones sociales. Y digo “sociales” incluyendo a hombres y mujeres pues no sólo los hombres las veían como un ser inferior sino tambien las mismas mujeres de sus épocas que las verían como bichos raros.
Mujeres que nadaban “contra corriente”, intentando hacerse sitio entre hombres que, por cuestiones sociales, culturales, religiosas (¿habeis leido algunas cositas de San Pablo….?), por lo que se ve tenían el monopolio en el mundo del “saber”.
Nada más que hay que fijarse en los libros de texto de los colegios de antes, donde no aparecen las mujeres por ningún sitio. La gente de nuestra generación creo recordar que sólo hemos estudiado a Rosalía de Castro, Fernan Caballero (por su pseudónimo) y Madame Curie (ésta además siempre la acompañaban con su marido, que seguro que era más torpe!)
Aunque hicieron unos grandes trabajos no eran objeto de investigación y estudio hasta que nuestra sociedad ha estado preparada para ello, por eso sus nombres iban quedando olvidados, aunque no sus obras.
En la pintura,  por ejemplo,  existen cuadros de la misma calidad que de pintores de los cuales los Museos están llenos. La mayoría siguen anónimos, mal atribuidos o apilados en sus almacenes. (Sofonissa Anguissola, pintora del renacimiento,  tiene cuadros idénticos que Sanchez Coello; Isabel Sitani, Lavinia Fontana, Artemisa Gentilleschi…) y muchas otras. Podríamos hacerle un favor a estas señoras, por lo que hicieron, tan fácil como buscarlas en Internet y echar un vistazo a sus obras que son magníficas. Ellas se lo merecen.


¡OLÉ LAS MUJERES ANÓNIMAS!
Escrito por mi prima Delia Pareja-Obregón Pol.