Ahora que ha empezado el otoño con lluvias
-torrenciales y catastróficas en algunas comarcas- pero beneficiosas al fin y
al cabo, me han entrado ganas de guisar platos sustanciosos y de mucha labor
coquinaria, pues es bien sabido que mientras el cocinero labora y se afana en
los fogones es muy conveniente que se vaya calentando el cuerpo con unos sorbos
de vino generoso, lo cual hará que las viandas se guisen con mas amor y sabor,
si cabe.
La primera receta lleva por título Zorzales
en Manteca, y tan solo recuerdo haber degustado este manjar en la
dehesa de Los Cerros, termino de Aznalcazar, vivienda habitual que fue de mi
querido tio Joaquín (q.e.p.d.) y ahora de mis primas Pilar, Pastora y Rocío, y
donde tantos zorzales se han cobrado. Era un verdadero espectáculo ver a mi tio
Joaquín y a mi padre bajando zorzales desde las nubes… dobletes van y vienen.
¡Benditos años!
Para esta delicada receta se precisan gran cantidad
de zorzales, por ejemplo unos doscientos. Se despluman con paciencia y se van
introduciendo bien limpios en una tinaja de barro cocido, de esas de aliñar
aceitunas. Al mismo tiempo se van trozeando y añadiendo ramas de tomillo, de orégano, de oloroso romero, un poco de sal, granos de
pimientas de varios colores, unos dientes de ajo enteros, y se riega
todo esto con un buen convite de mosto mágico del Aljarafe.
Una vez que los
zorzales ocupan sus tres cuartos de lugar en la tinaja, bien mezclados con el
suntuoso aliño y bañados por el mosto, es el momento de añadir a cucharazos de
madera tanta manteca blanca de cerdo como admita la marmita. Dicha marmita se
colocará a la vera de la chimenea del hogar que se mantendrá acogedoramente
encendida con reconfortantes brasas, poca llama por favor, y a una distancia
tal que se vayan cociendo muy lentamente en sus propios jugos los delicados cadáveres de los
desplumados volátiles e impregnandose de los jugos y esencias que los abrigan. Un cuarto de vuelta cada seis u ocho horas. Nunca menos de un día ni mas de dos. Después otro día de reposo al relente para
que cuaje de nuevo la manteca, ya de color zorzal y campo.
Dentro de la marmita y al fresco este manjar se conserva durante varias semanas cubierto de manteca protectora.
Se degusta este manjar sobre una generosa rebanada
de pan a modo de plato, sirviendose con la cuchara de madera zorzales y manteca
a discreción. Y mosto, por supuesto.
Otra receta muy querida por mi es el famoso Conejo
a la Pólvora.
Antes de que las enfermedades virásicas diezmaran la población
de conejos del entorno y del Parque de Doñana, en la dehesa de Los Cerros no
había día que no se cazaran unos cuantos de ellos y sirvieran como base proteica
alimenticia para todos los que por alli parabamos. Se guisaban de mil y una
maneras, cada cual mas deliciosa, pero a mis primos y a mi nos gustaba
prepararnos nuestros animales con la receta que explico a continuación.
El conejo recién cazado ha de ser eviscerado y
despellejado lo antes posible, lo cual es bastante facil de ejecutar tan solo
con la ayuda de el filo cortante de una pequeña navaja bien afilada. Dos tajos
daremos al animal, uno longitudinal en la barriga y otro horizontal en el lomo.
Un seco moviendo de brazos bastan para que todo el paquete intestinal del
roedor salga despedido y sirva de tapa para los fieles canes que nos acompañan
en la caza. Luego introducimos los dedos por el corte horizontal del lomo y
despellejamos al vacío conejo de su pijama de peluche. No mas de treinta
segundos. Su carne rosada y caliente pide a gritos ser devorada.
Una candela en la puerta del cortijo con brasas
ardientes hecha con ramitas secas de encinas y alcornoques, de jara, de
retamas… una parrilla de fierro sobre las brasas y sobre ella depositamos el
cuerpo del delito abierto en canal y descoyuntado. Sal gorda, la justa. Y
“polvora” que no es otra cosa que abundante pimienta negra molida que al
motearse sobre la blanca carne asada del conejito da un aspecto muy similar al
de la pólvora de los cartuchos. Por eso muchos invitados a estos festines se abstenian
de probar este manjar en la creencia que se les ofrecía conejo asado con pólvora…
¿Alguno de ustedes son capaces de pensar que mis
primos o yo seriamos capaces de hacer algo parecido…?
No contesten por favor….
Lo de los zorzales gran invento, lo de cocinar con polvora no lo dudo ni un momento, conociendo a los PAREJA hasta con trilita.
ResponderEliminarAhora mismo mientras te leo estoy cocinando una gallina de campo en pepitoria coriana.
Un abrazo CELSO.
jajaja... Un fuerte abrazo amigo Jose Luis.
EliminarTenemos pendiente un arrocito o cualquier guisito de los que tu haces...
Amigo Celso, acabo de volver a SEVILLA, me pongo en marcha y ests otoño organizmos una comida, voy a estar aqui unas semanas y lo organizamos.
Eliminarbuuuhh....
ResponderEliminarBueno, el comentario de arriba no es mío, mis hermanos saben quién lo haría..Con todo mi amor.-
ResponderEliminarVale a mi me gusta de todo..pero hay cuatro cosas que no como, no soporto, no trago, no transijo..
Los pájaros, los que vuelas, los que planean, ésos ni los jamo ni los quiero ver ni en pintura.
Los conejos, no soy de conejos, nono..
Las ensaladas con muchos yerbajos que no sean: lechuga, tomate, zanahoria, cebolla..Las yerbas modernas nooooo..
La alta cocina, los humos, los humus, las espumas, los desestructurados, los nosequé sobre cama de, que al final es un plato enorme con un trocito de carne, 50 gramaos o menos, un espárrago y rúcula, un yerbajo, para mi..Uff no puedo y un garabato de colorines..Y como le pongan a todo ésto una peineta..me levanto y me voy poniéndole yo la peineta al restaurante en cuestión, chimpón.-
Pues yo como Lourdes, no me gustan los huevos "poché" aderezados con pétalos de sal fossil sobre cama de patatas de arena con jarabe de aceite de trufa. Me gustan los huevos fritos con papas fritas y un buen pan de pueblo. Mmmmmm
ResponderEliminarPilar Fuertes.
Dios Santo Pilar..qué nombreteeess nos ofrecen a veces para comernos unos huevos con papas..Tienes toda la razón.-
Eliminar¿eing? ¡¡¡Madredelamorhermoso!!! por eso yo nunca voy a salir de cocinera poliganera. xddd.
EliminarCon permiso, me quedo. Encantada.
Por supuesto; huevos fritos con papas y pimientos fritos, si hay un choricillo a mano pues también cae. Tampoco le hago feos a unas papas con chocos o a una buena pringa y por ultimo si llega la ocasión.......un bocata de mortadela que me encanta.
ResponderEliminarSaludos y buena semana para todos.-
Impresionante el bocata de mortadela o de salami en un pan de viena crujientito, a media tarde-noche con un par de botellines helados de la mismisima Cruz del Campo....
Eliminar¡Viva tu!
A ver Pincho, luego dices que engordas. A mis huevos con papas le has echao de tó. No te va caber la cruzcampo. Vés?, o se come uno una cosa o la otra. Así 49 Kg.
ResponderEliminarY al Doctor le doy la razón, yo no perdono mi bocata de chorizo a media tarde.
Abrazos. Pilar Fuertes.
Al leer las recetas familiares de Celso me he acordao de un manjar que preparaba tio Manolo. En la finca de mi padre "El Puerto la Virgen" se ponía por la mañana muy calladito, con mucho espero y parsimonia a prepará "tostás". Primero partia por la mitad un pan, de pueblo, por supuesto, y con la navaja la iba haciendo surcos, para un lado y para el otro, quedando dibujados muchos rombos en el pan. Despues le refregaba ajo, no mucho, justo para darle chispa al "erustito", y aceite de oliva, pero de color de la aceituna. Por último lo acercaba al fuego, pinchado en un palo y dejaba que, lentamente, el pan se fuera dorando. Cuando estaba turradito y doradito lo ponía en la mesa y os podeis imaginar como nos avalanzábamos todos a la tostá! ¡Qué tiempos! ¿te acuerdas, Celso, de las tostás que nos comíamos en el puerto la virgen?
ResponderEliminarPor cierto, la que se comía las tostás... soy Delia!!
ResponderEliminarAh! Y si toda la vida ha sido tostá, ahora por qué decimos tósta????
ResponderEliminar¡Me acuerdo Pri y eran las tostás mas roca que he comido en mi vida! Y además el olor a chimenea, a café, a campo recién amanecido, a cariño por todas partes...
ResponderEliminarhace tiempo que vengo luchando contra la cursilada del as TOSTAS con perendengues... El otro día estuve en un pijerío que una TOSTÁ con tomate y sardinas asas costaba doce (12) euros... dos mil calas...
¿Estamos todos tontos?
¿Yo me he vuelto loco?
¿Cuanto corre un guepardo?
Tostá: 0,10 €
ResponderEliminarTomate: 0,20 €
Sardina: 1,00 €?
Total: 1,30 € en mi casa como mucho.
Cruzcampo: 0,50 € X 2 = 1,00 €
Perdona pero que son perendengues?
Pd. Los guepardos corren entre 95 y 115 Km/h. (Lo he mirado en google)
Perendengue: Cualquier adorno de poco valor... (En el caso que nos ocupa, hojas de perejil picado, gota de mermelada de lo que sea que sobre, churretón de salsa sobrante, aceite de la lata de anchoa de otro plato ... etc), es decir, pamplina en tosta. Para cobrar el 200 por cien o más de su valor. Por eso la gente no sale a la calle, porque ya no se puede pagar una Coca-Cola a 3 euros que en tu casa te cuesta menos de 50 céntimos. RP
EliminarMil gracias por la definición. Jamás pediré una tostá con perendengue. No olvidaré nunca esta palabra.
EliminarUn abrazo. Pilar Fuertes.
Gracias prima Rocío por tu ayuda y saber.
ResponderEliminarAnimate y cuentanos alguna historia de esas tan bonitas que tu sabes de la familia... anda... porfa...
Muchos besos.
A ver si es verdad que mi prima tiene arte fe sobra..
ResponderEliminarLourdes
De sobra....Rocío hihha, escriba algo..Aunque ya se que ahora estás más ocupadita..Un beso Reina, tu prima que te quiere..
EliminarGracias primos, os leo todos los días, me gusta muchísimo todo lo que escribiis y como lo expresáis. Sois únicos de verdad. Ahora mismo estoy sin gas, con la mente en otro sitio. Os quiero mucho. Rp
Eliminarole mis pris! y ole misnmanas!!!, hace tiempo que no puedo meterme en el blog por falta del mismo, algún día me pondré al corriente...... pero no pareis de poner cositas que nos gustan mucho, algún día..... prometo.... leerlo toito tó!!!!! con una guena tostá mu tostá con perendengue! c.s.
ResponderEliminarHoy friendo un huevo con el aceite muy caliente, como debe ser..me ha saltado con una explosión enorme..tengo una mano bendada...no es más que una quemadura superficial, pero duele con cohhones..Odio freir huevoooss, receta muy dificil, ayyyy mi manooo..
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