Ahora que esta tan de moda hablar de las dietas y
los regímenes de adelgazar y de cómo perder peso haciendo esta o aquella dieta
milagrosa y que algunas de ellas parecen mas un castigo divino o penitencia que
otra cosa quiero hacer unas reflexiones sobre la capacidad que tienen los
alimentos de promover cambios en nuestras hormonas y consecuentemente cambios
en nuestro metabolismo.
Lo más básico es recordar que cualquier alimento
esta compuesto básicamente:
- Proteinas, constituyentes principales de la carne
animal, del pescado, los lácteos y de muchas legumbres y cereales.
- Lípidos, presentes en las partes grasas de los
animales y pescados, en la leche entera, los quesos, los aceites y el huevo.
- Glúcidos
o glícidos, representados por los hidratos de carbono (HdC) contenidos
en el almidón y otros precursores glúcidos que contienen muchos alimentos sobre
todo los azucares, la miel, cereales (pan), legumbres, arroz, pasta, bollería
industrial y frutas.
Bueno pues os recuerdo que la gasolina de todas las
células de nuestro cuerpo es la Glucosa y que esta se quema en presencia del
oxígeno (se metaboliza) dentro de cada célula para obtener la
energía que mantiene viva a todas y cada una de las células que forman nuestro
organismo, nosotros mismos, vaya… Sin glucosa y sin oxigeno: caput.
Nuestro cuerpo es tan listo que sabe obtener glucosa
a partir de cualquiera de los tres compuestos básicos: proteínas, lípidos y
glúcidos, pero es de estos últimos como la consigue de manera mas económica y
más eficaz. Muchas veces solo con masticar algunos alimentos ya se produce glucosa que se
absorbe a la sangre con mínimo consumo de energía y sin dejar desecho alguno.
Si se agotan los HdC de la sangre y del hígado obtenemos glucosa de los lípidos
quemando los depósitos de grasas acumulados en el tejido adiposo; esto es
frecuente también y es la base de muchas dietas para adelgazar. En último caso
el organismo puede obtener energía/glucosa utilizando las proteínas de nuestra
propia carne, de los músculos, pero esto no es nada conveniente.
De manera que lo importante para obtener energía
(vida) es la molécula de Glucosa circulando por la sangre. Esta glucosa tiene
que penetrar en las células y para eso se necesita un vehículo que se llama
Insulina, que es una hormona fabricada por el páncreas que se une a unos
receptores de las paredes celulares y facilita la entrada de la glucosa en cada
célula, donde le espera ansioso el oxígeno para “quemar” esa glucosa y obtener
“calor” y energía para vivir.
A mas glucosa circulante en la sangre, más
liberación de insulina por el páncreas y viceversa. Pero la Insulina, cuya
función fundamental es facilitar la entrada de la glucosa en cada célula, tiene
otros efectos sobre nuestro metabolismo, de hecho, cuando es mucha la glucosa
circulante y a las células les sobra glucosa porque no pueden metabolizar tanta
cantidad, la insulina es capaz de convertir ese exceso de glucosa en sangre en
moléculas de ácidos grasos que se almacenará en los depósitos de grasa.
Es decir, no interesa que haya muchas liberaciones
bruscas de insulina pues el efecto sobre nuestro organismo es producir
hipoglucemia y al poco tiempo sensación de hambre y a la vez se activa la
formación de grasas. Un circulo vicioso.
El Indice Glucémico (IG) es la capacidad que tiene
una cantidad estandar de cualquier alimento para elevar la cantidad de glucosa
en sangre (y su correspondiente liberación de insulina posterior). Los
alimentos con mayor IG ocasionan subidas bruscas de glucemia en sangre y
liberaciones de insulina más altas, por lo tanto también que se formen y acumulen
mas grasas: son alimentos que debemos evitar en exceso porque a la larga
engordan.
Si tomamos como índice la propia molécula de glucosa
y le asignamos un valor de 100, podemos configurar una tablas de IG de los
distintos alimentos midiendo la capacidad que tienen de elevar tanto la glucemia como la
insulina tras la ingesta de una cantidad determinada de ellos. Los alimentos
con IG más elevados son:
- - Bollería industrial, pasteles, dulces, cereales “Corn Flakes”, helados, etc: tienen un alto IG en torno a 75-85. Es decir, es casi comer azúcar puro. Además como en su composición llevan grasas abundantes tienen muchas calorías: engordan una barbaridad.
- - Pan, patatas y arroz: IG entorno a 70-75. Hay que evitar comer a diario estos alimentos en grandes cantidades, en exceso son “atrapagrasas”.
- - Frutas dulces como la sandía (72), piña (66), melón (60), naranjas (57), plátanos (54), uvas (46), melocotón (42)… que aporten pocas calorías no significa que no aumenten la glucosa en sangre.
- - Las pastas, macarrones, espaguetis, fideos, etc, tiene un IG de 50.
- - La bendita cerveza tiene un IG de ¡85! El vino tinto 0 patatero, es decir casi nulo efecto sobre la glucosa y la insulina.
- - El aceite de oliva también 0, pero es hipercalórico.
Es decir, por lógica, las personas con tendencia a
tener el azúcar alto o con deficit de insulina (los diabéticos) y aquellos que
tengan sobrepeso u obesidad deben ser los mas interesados en evitar estos alimentos
con alto Indice Glucémico.
Adjunto pagina web con mas información al respecto y
tablas de alimentos:
Espero que os sea util.
Tenías razón. Y no solo por mi profesión, sino a título personal: Obesa desde niña, he ido adquiriendo experiencia en éstos asuntos sí o sí. Tenía entendido que los HC, tanto simples (glúcidos) como complejos (almidones), actúan como "pegamento" o, como tú los llamas "atrapagrasas". Es la base de la teoría del Dr. Atkins en los 70 (hoy copiada por el tal Dukan). Ojo, solo la base. Tengo sobrados motivos para ponerme en contra (cosa que pocas veces hago) con toda efusividad de éstos métodos. Seguramente tú también.
ResponderEliminarAdonde quiero llegar es a que postulo, bastante convencida, la disociación. Y más allá, el ayuno terapéutico inteligente de manera ocasional.
La dieta, no obstante, que más razonable me ha parecido en toda mi vida, porque consigue compatibilizar todas éstas cosas, es una que tengo publicada en mi blog, y que me prescribió, en un momento dado mi doctora de familia.
Gracias por recomendarme la lectura. :)
Gracias a ti Lochy y a tu estupendo Blog: http://lochycocinoparati.blogspot.com/search/label/En%20general
Eliminarque aconsejo que todos lo visiten.
Un beso.
Qué bien lo has explicado, Celso. Todo lo que le quería preguntar a mi médico de cabecera en la próxima visita me lo has contado tú en pocas líneas y ya voy entendiendo mucho mejor de qué va esto de la glucosa. También entiendo las hipoglucemias que sufro a veces: creo que tengo que comer más a menudo, 5 veces al día sin saltarme ninguna.
ResponderEliminarMuchas gracias y un abrazo.
Pues si Gusy, para evitar las peligrosas hipoglucemias lo mejor es comer alimentos con bajo IG y alimentarse varias veces al día. Es lo más sano.
EliminarGracias a ti y un abrazo.
Estupenda y necesaria información, Celso, además en un lenguaje entendible. Lo único malo es lo de la cerveza ¡Vaya tela! He echado un ojo al blog de Lochy ¡un descubimiento! Si me animo, a lo mejor cambio el bizcocho de mañana por los pestiños. Y me olvido del IG... :-)
ResponderEliminarMuchas gracias. Un abrazo fuerte.
Carmela
Gracias prima! ... A lo de la cerveza la verdad es que yo no echo mucha cuenta... soy cervecero profesional... jajajaja
ResponderEliminarEl Blog de Lochy es buenisimo¡
Un beso.
Estupenda esta información, sobre todo ahora que se va acercando la primavera y el verano y empezamos a lucir las carnes. Es hora de quitarnos algunos kilitos, en fín, comeremos mucho poroto!! Besos.
ResponderEliminar