Gracias
a la Iglesia Católica sabemos que los enemigos del Alma son tres: el Mundo (así,
a lo grande, sin entrar en detalles…),
el Demonio (incluyendo todos sus
detalles y manifestaciones laicas) y la
Carne… Esta “carne” supongo que se refiere a la carne concupiscente de los cuerpos
humanos desnudos (o casi) que genera atracciones entre las entretelas y los
archibebes subliveyando al personal corriente y moliente, “carne” que nos lleva a tener pensamientos y actos impurísimos
desde el ombligo al sur… si no estamos debidamente matrimoniados. (No mezclemos
conceptos que me estoy liando)
Pero
ahora la Organización Mundial de la Salud (OMS) nos advierte que la carne
también es muy mala malísima para la salud de nuestro cuerpo. Advierten estos
señores a bombo de televisión y prensa que las carnes de animales “procesadas”
y carnes rojas cocinadas son cancerígenas ¡Toma ya! Y lo publican así, sin
anestesia.
Yo
creo que lo que no está bien procesada es la información al respecto.
Porque
la OMS constata una evidencia observada en sus resultados estadísticos que no
es lo mismo que un estudio científico realizado randomizado a doble ciego y con
resultados contrastados en el laboratorio.
Es
decir y me explico, según creo que quiere decir la OMS:
Los
grupos de población –continentes enteros- donde el consumo de carnes de
animales procesadas por industrias de conservación y transformación de
alimentos es elevado presentan una incidencia mayor de algunos tipos de cáncer
que aquellos otros grupos poblacionales que incluyen en su dieta mas alimentos naturales,
vegetales, cereales, lácteos, pescados, frutas y menos procesados
industrialmente con carnes de animales.
Esto
es una evidencia y los médicos lo sabemos desde hace muchos años.
Pero
la OMS se ha pasado tres pueblos –serranos- generalizando sin hacer distinción
entre los distintos tipos de procesamiento de los alimentos cárnicos. Ejemplo: El
jamón de cerdo ibérico “de bellota” es una medicina natural anticancerígena,
eso lo digo yo aquí y en la China.
Los
embutidos y chacinas serranas o de secano ya sean andaluces, extremeños,
catalanes, manchegos, leoneses, gallegos, navarros, riojanos, murcianos,
montañeses, asturianos, vascongados o madrileños, son todos un compendio de
alquimia alimenticia sana y nutritiva, por supuesto siempre en su justa medida.
Los
chorizos, salchichones, butifarras, cañas de lomo, morcones, mortadelas,
cecinas, etcétera, han aportado y aportan un valor nutricional incuestionable a
la mayor parte de los jóvenes –y no tan jóvenes- de España. Comparar estos
productos con otros carcinogénicos como el tabaco, por ejemplo, es una
verdadera barbaridad. ¡Como va a ser igual que un chaval de quince años en el
recreo de media mañana se fume un cigarrillo a que se coma un bocadillo de
chope!
Es
cierto que para procesar estos productos cárnicos –chacinas y embutidos- y
hacerlos duraderos se someten a procesos químicos de salazón, humidificación, secado,
ahumado, fermentación o cocción y se les añaden conservantes y saborizantes
químicos. Considero que el abuso persistente y abusivo de estos productos
durante años puede incrementar el riesgo de contraer algunos tipos de cáncer,
sobre todo los relacionados con el aparato digestivo. Ya se conocían estudios
previos que relacionaban el consumo de carnes rojas, salchichas, hamburguesas y
similares, cocinadas directamente al fuego, con la producción de sustancias
químicas cancerígenas presentes en el humo y en los resto de carne abrasada.
Pero
lo que convierte en verdaderamente cancerígena a cualquier sustancia ya sea al
tabaco o al alcohol o al humo -de los tubos de escape de millones de
automóviles- o a la constante y realísima contaminación de las fábricas (Polo
Químico de Huelva), es la dosis de sustancias carcinogénicas que se liberan al
aire ambiente o al agua y luego son inhaladas o ingeridas. La capacidad de
hacer mutar a las células sanas y convertirlas en probables cancerosas depende
solo de la cantidad –dosis- y del tiempo de
exposición prolongado a estos estímulos tumorales, ya sean físicos
radiactivos o químicos.
Demonizar
a un bocata de chorizo es absurdo e irrelevante y solo sirve para crear desasosiego
social injustificado, sobre todo cuando nos movemos en un ambiente de polución
ambiental industrial y ciudadana mucho mas peligroso de lo que nos creemos. Y
menos mal que ya estamos menos expuestos a los humos cancerosos de los
cigarrillos asesinos que tantas vidas se llevan a diario por delante.
Pero
piensen que cada vez que usted se impregna de un gel de baño o de un
desodorante, cuando se aplica un tinte en el pelo, cuando se embadurna de
cremas emolientes, cuando usa un preservativo o se depila las ingles, cuando se
toma un analgésico o se aplica una pomada está poniéndose en contacto con
sustancias químicas que en su proceso de fabricación han usado muchos mas
productos cancerígenos de los que hacen falta para secar los jamones de un año
entero en todo el mundo.
¡Viva
el jamón de cerdo ibérico y todas sus circunstancias!
¡Viva Huelva y sus fandangos!
¡No se depilen!
Y es que como usted bien dice, lo que no se puede es ir acojonando al personal de esta manera. A ver que narices comen estos papas fritas de la OMS.
ResponderEliminarAcaso Ilustres Srs. de la OMS han analizado ustedes en sus laboratorios la pringa "con tos sus avios", la carne con tomate, el hígado encebollao, los huevos fritos con chorizo, el atún metio en manteca, una buena presa ibérica asada con una buenas papas aliñas al lado...... pues estudien, estudien y verán como todo lo anterior en su justa medida es hasta bueno y saludable.-
Un abrazo compañero.-
Grande y fuerte abrazo Pincho.
ResponderEliminarGracias.
UN MUNDO RARO.- Casos y cosas que no logro entender, y es cosa fácil porque sé de mis muchas limitaciones, además ultimamente estoy algo desolada y como revelá ante tanta desgracia en general y tanta tontera en particular. Yo,como tantas madres de hoy día, tengo a mis hijos lejos, y a mi nieto que es lo que más duele, están en unos países magníficos que luchan en estos momentos con lo más irracional y fanático de unos seres que ni son humanos ni han aprendido a serlo en tantos años de evolución. La intranquilidad sigue ahí mientras intento llevar una vida acorde y feliz. Ahora paso a describir algunos casos que veo y que por más que mastico no logro entender.
ResponderEliminarAcabo de ver en la red social facebook que en unos grandes almacenes se encuentran ya a disposición de quién lo necesite o se quiera solidarizar con la causa, el muñec@ con cáncer. Se ve a una especie de bebé pelón con pañuelo en la cabeza, cejas que son tres rayitas escasas y tez pálida, los ojos muy abiertos y la sonrisa triste, hay comprador@s muy solidari@s, no doy crédito ni digo nada más al respecto, nada.
Veo también a una mujer famosa y guapa a la que no se le conocen, al menos ella no dice nada, estudios de sicología que me invita a su página de "Coauchc emocional", a mi y a muchas personas, cosa que me tranquiliza, para que nos apuntemos a su blog de salvación emocionales, tiene estampas de flores animalitos y paisajes bonitos con frases muyyy previsibles, por eso cobra un pastón.
Ell otro día murió aquí una anciana, una mujer sencilla a la que conoco de siempre. No salía más que a la compra, era poco de misa y se entretenía con su hermana haciendo dulces y tapetes de crochet. Su único hijo bien situado en la ciudad y muy metido en una " obra" o rama eclesiástica muy específica. Para el entierro de la buena mujer, hubo misa concelebrada, tres sacerdotes, coro y muchas palabras de ensalzamiento. A mi santo y a mi nos pareció una enorrme falta de respeto. El otro día me refería a las dos españas, hoy me refiero a las dobles morales. Todo con tal de ganar pasta, presumir de solidarios a costa del pudor de unos niños y cánticos sin conocimiento y sin necesidad, con un solo cura hubiera bastado para llevar a una persona a manos de la Divina Povidencia, Esta si que tiene que estar escandalizada, desde que le dió por crearnos.-